Colegios Dios es Amor

Los Colegios Dios es Amor son unas instituciones educativas cristianas comprometidas con la formación integral de niños, niñas y jóvenes, basada en la enseñanza de principios y valores bíblicos. Prestamos un servicio educativo de alta calidad, orientado a desarrollar en los estudiantes competencias académicas, sociales y espirituales que les permitan construir una vida plena con propósito, impactando positivamente su entorno y contribuyendo a la restauración integral de la sociedad.

La propuesta educativa del colegio está respaldada por una política de calidad que promueve la coherencia institucional, el fortalecimiento del talento humano y la mejora continua de nuestros procesos; garantizando el cumplimiento de los requisitos legales y éticos que rigen el sector educativo. En este marco, nuestros objetivos institucionales se centran en alcanzar la excelencia académica, fomentar la formación integral de los estudiantes, avanzar hacia la sostenibilidad institucional, fortalecer el desarrollo profesional del equipo de trabajo, y cultivar una cultura de mejora continua.

Nuestra Misión

Prestar servicios educativos de alta calidad en diferentes entornos de aprendizaje, fundamentados en principios y valores bíblicos, con el propósito de capacitar a niños y jóvenes para construir una vida plena que contribuya a la restauración integral de la sociedad.

Nuestra Visión

Los Colegios Dios Es Amor son líderes en el sector educativo por su compromiso con los principios y valores bíblicos, la excelencia académica, innovación tecnológica, y el desarrollo integral de las nuevas generaciones.

Políticas de calidad

En compromiso con el horizonte institucional y las partes interesadas presta una educación integral de calidad. basada en principios y valores bíblicos. bajo criterios de excelencia, innovación, coherencia y sostenibilidad: fortaleciendo el talento humano, el aprendizaje institucional y el mejoramiento continuo de su gestión: asegurando el cumplimiento de los requisitos aplicables.

Objetivos de Calidad

Valores

Estos valores y conductas constituyen el marco ético-moral que orienta la formación integral en el modelo “Escuela con Propósito”, buscando el desarrollo de seres humanos que reflejen en su carácter y acciones, los principios fundamentales de la cosmovisión bíblica, contribuyendo así a la transformación sostenible de sus comunidades.

DIGNIDAD

Constituye el reconocimiento del valor intrínseco del ser humano como creación a imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:26-27). Este valor fundamental se manifiesta a través de cuatro conductas esenciales:

  1. Excelencia: compromiso con el desarrollo máximo de las capacidades y talentos dados por Dios, manifestado en la diligencia y la calidad del trabajo realizado (2 Pedro 1:5; Colosenses 3:23).
  2. Honestidad: práctica constante de la verdad y la transparencia en todas las acciones, rechazando la mentira y la deshonra (Proverbios 13:5).
  3. Innovación: disposición para crear y desarrollar nuevas formas de responder a los desafíos, reconociendo la naturaleza renovadora de Dios (Apocalipsis 21:5; Isaías 43:19).
  4. Trabaja duro: actitud de diligencia y esfuerzo constante en el trabajo, que conduce a la prosperidad y al desarrollo del potencial humano (Proverbios 13:4).

Comprende el desarrollo holístico de los dones y talentos otorgados por Dios (Efesios 4:7), junto con la responsabilidad de ponerlos al servicio de la sociedad. Se expresa a través de cuatro conductas fundamentales:

  1. Unidad: promoción de la armonía y la colaboración en la comunidad educativa (Efesios 4:3; Salmos 133:1).
  2. Servicio: disposición para contribuir al bienestar de otros, siguiendo el ejemplo de Cristo (Mateo 20:28; Gálatas 5:13).
  3. Respeto: reconocimiento y valoración de la dignidad inherente a cada persona (1 Pedro 2:17; Mateo 7:12).
  4. Generosidad: actitud de dar y compartir con alegría y liberalidad (2 Corintios 9:7; Proverbios 11:25).

La libertad se fundamenta en la autoridad intrínseca otorgada por Dios al ser humano para ejercer su capacidad de elección con responsabilidad (Gálatas 5:13; 2 Corintios 3:17). Se manifiesta a través de cuatro conductas esenciales:

  1. Lealtad: fidelidad a los principios y compromisos asumidos (Apocalipsis 2:10; Salmos 85:10).
  2. Gratitud: reconocimiento y apreciación de los beneficios recibidos (1 Tesalonicenses 5:18; Salmos 100:4).
  3. Responsabilidad: capacidad de asumir y cumplir con los deberes y compromisos propios (Gálatas 6:5; Lucas 16:10).
  4. Justicia: compromiso con la equidad y la rectitud en las relaciones y decisiones (Amós 5:24; Mateo 5:6).

Principios

Amor

Dios es Amor. El amor siendo uno de los atributos de Dios, resume a su vez, la esencia de la fe cristiana y constituye el principal enfoque en el ministerio de Cristo. Nuestro accionar se basa en el amor de Dios hacia el ser humano; manifestado en la creación, el pacto, la justificación y redención, el amor del ser humano hacia Dios y entre los seres humanos, como mandato divino. (1 Juan 4:7-8; Mateo 22: 37-39; 1 Corintios 13)

Identidad

El ser humano, creado a imagen de Dios, conserva capacidades únicas que, aunque afectadas por el pecado, siguen reflejando su valor intrínseco. Esta imagen inspira el servicio cristiano integral, que busca restaurar la identidad y desarrollar el potencial en todas sus dimensiones. (Génesis 9:6; Santiago 3:9; Salmo 33:13-15; Romanos 8:29; Efesios 4:24)

Compasión

El ministerio de Cristo, movido por compasión y comprensión del sufrimiento humano, es el modelo de acción para nuestra organización. Siguiendo su ejemplo, llevamos las buenas nuevas, ayudando al prójimo a recuperar su identidad y propósito, con humildad y conscientes de la compasión que Dios nos ha mostrado. (Mateo 9:36; 14:14; 20:34; Marcos 1:41; 6:34; Santiago 2:13)

Mayordomía

El mandato de Dios de "fructificad y sojuzgad la tierra" (Génesis 1:28) revela la vocación humana de administrar con responsabilidad los recursos. Como organización, creemos que la mayordomía —con rendición de cuentas e integridad— debe guiar cada área de nuestra acción. (Génesis 2:15; Proverbios 6:6-11; 24:27; 2 Corintios 9:6-8)

Interdependencia

La interdependencia implica compartir principios comunes y asumir responsabilidad mutua, equilibrando dependencia e independencia. Somos responsables ante Dios, llamados a aceptar su gracia, gobernarnos a nosotros mismos y guiarnos por el Espíritu Santo, tanto a nivel personal como social. (1 Corintios 12:4-28)

Nuestra Historia

Preocupado con la indigencia, la prostitución, la delincuencia, y la violencia intrafamiliar, Lindsay Christie invirtió el resto de la herencia de sus padres en establecer guarderías y preescolares en las zonas de Lucero Alto, (Ciudad Bolívar), y en el centro de Bogotá, en la Calle del Cartucho La Candelaria. Lugares donde también desarrolló el “Plan Sopitas”, que extendía una mano amiga a los indigentes de Bogotá, brindando un alimento caliente y una oportunidad para buscar salida a su condición.

Un ejemplo de entrega, de obediencia a Dios, una vida entregada como dice Juan 15:13, por sus “amigos”, ¡los pobres! La visión era clara y compartida; las expectativas, grandes. Sin embargo, en 1993 Lindsay fue diagnosticado con cáncer y luego de un tiempo difícil de lucha contra la enfermedad, en septiembre de 1994, partió a la presencia del Señor. Parecía como si todos aquellos sueños y logros se hubieran perdido, pues pocos días antes de su muerte, la oficina principal fue saqueada, el periódico DESAFIO había suspendido la circulación y los proyectos educativos, si bien estaban construidos sobre bases sólidas, llevaban poco más de un año de establecidos teniendo un sin número de necesidades para garantizar su operación. Fue un tiempo difícil, de mucha incertidumbre, pero a su vez un tiempo en el que comprendimos que la visión no era simplemente de Lindsay Christie. Él tan solo era un siervo obediente. La visión ardía en el corazón de Dios. Era Él quien la había revelado y Él se encargaría de Continuarla. Así, ese legado de servicio comenzó a germinar.

¡Demostrar con hechos el Amor de Dios! Este era el lema del “Hermano Linsi”, y estas palabras fueron precisamente la motivación para que en Marzo de 1996 se estableciera formalmente la Corporación Dios es Amor ahora llamada CONVIVENTIA, entidad privada sin ánimo de lucro, desde la que se asumió la responsabilidad de dar estructura y soporte a los nacientes proyectos. Desde ésta, progresivamente trabajamos hacia el fortalecimiento de la labor educativa con mejoras continuas en infraestructura y capacidad, se profesionalizaron paulatinamente los servicios prestados y paralelamente se iniciaron nuevos programas en atención a las principales necesidades detectadas con las comunidades.

Nuestra Historia

Un legado que nació del amor y la compasión por los más vulnerables

Años 80s
Inicios con propósito

Movido por la preocupación ante la indigencia, la violencia intrafamiliar y la pobreza, Lindsay Christie fundó guarderías en Lucero Alto y La Candelaria. También creó el “Plan Sopitas”, brindando alimento y esperanza a los más necesitados.

XXXX
Una vida entregada por amor

Lindsay vivió Juan 15:13: "Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos". Su legado fue obediencia, entrega y fe.

1994
Despedida terrenal, continuidad celestial

En 1994, Lindsay partió a la presencia de Dios, dejando sueños a medio camino. Sin embargo, su visión no murió con él: fue sembrada en muchos corazones.

1996
Nacimiento de Conviventia

En marzo de 1996 nace oficialmente CONVIVENTIA, como una respuesta a la necesidad de continuar lo que Dios había comenzado a través de Lindsay.

Presente
Hoy el legado continúa

A través de programas educativos, de desarrollo comunitario y atención integral, Conviventia sigue mostrando el amor de Dios con hechos, alcanzando nuevas generaciones.

Por qué Colegio Dios es Amor

Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.